La tecnología avanza cada día desarrollando renovadoras soluciones para mejorar a las personas. En XXX os mostramos de qué forma unos científicos de Japón han investigado una cola que ayuda a supervisar el centro de gravedad, mejorando así la agilidad de los humanos.
Se llama Arque y es una extremidad diseñada por un grupo de estudiosos de la Universidad de Keio. El equipo de estudiantes está constituido por Yamen Saraiji, Junichi Nabeshima y Kouta Minamizawa. Es un sistema móvil inspirado en la biomimética. Incorpora robótica y a nivel de estructura tiene aspecto antropomorfo artificial, recordando a un caballito de mar.
El proyecto ha querido repetir por la forma en que diferentes animales utilizan sus colas a la hora de desplazarse, como es el caso de los monos.
La extremidad robótica dispone una longitud de setenta y uno centímetros por 11.5 cm de ancho, y tiene un peso que se aproxima a los dieciséis kilogramos. En la parte externa se encuentra recubierta de placas de plástico, con los que, cuando se encuentra moviéndose en las 8 direcciones que es capaz, permite supervisar el centro de gravedad de las personas.
Para poder estabilizar los movimientos, el usuario lleva incorporado en su cuerpo un localizador anatómico. Este aparato es quien se encarga detectar los datos del estado del centro de gravedad de la persona. Tras analizar los datos, emite una señal a fin de que se accione la cola y corrija el centro de gravedad.
Las posibilidades de Arque favorecen a que, gracias a que ejerce de contrapeso, tengamos un mayor dominio del equilibrio que nos permita a su vez ser más ágiles.
Arque partió de acoplar seis vértebras de plástico que se hallan interconectadas, las cuales se pueden poner a nuestro gusto en función de la envergadura de la persona.
Dentro de la cola robótica podemos hallar cuatro músculos que son hechos por el hombre, los cuales, por medio de aire comprimido, hace que Arque se desplace en diferentes direcciones contrayéndose cuando es necesario.
Las capacidades de Arque son numerosas, tanto para el trabajo, como para ayudar a los grupos con incapacidades. Nos permitirá mantener el equilibrio que frecuentemente perdemos al ponernos unas lentes de RV. Colaborará en los grupos de rehabilitación a pacientes con problemas lumbares.
Las personas de tercera edad o con problemas en las piernas, van a ver mejoradas en su día tras día con la cola robótica salvando las inoportunas caídas por falta de equilibrio. En el campo laboral, el sistema biónico va a facilitar a los obreros cuando manipulan y llevan pesos en situaciones de riesgo.
La cola que ha sido hecho público dará la posibilidad de aprovechar el impulso de nuestro cuerpo, logrando la retroalimentación háptica.
Para finalizar tenemos que indicar que antes que Arque sea puesto en venta todavía debe optimizarse distintos aspectos, como que pueda ser independiente a través de una batería, en tanto que en la actualidad se halla unido a una entrada de aire.